Sombreros

Como primer e indispensable punto me parece necesario destacar lo que se sabe acerca de su historia, y claro, el fundamento de su utilidad: ¿En dónde se usó el sombrero por primera vez? La respuesta es simple: en la cabeza.

Cabe suponer que la idea de utilizar algún objeto sobre la cabeza surge como pretensión de protegerse de algo, del frío, del sol o de la lluvia, y que al comprobar que al menos parcialmente funcionaba se destinaron considerables recursos tanto manuales y creativos como intelectuales al propósito de optimizar su diseño en aras de un mejor funcionamiento.

Origen del Sombrero

Los antecedentes fidedignos más remotos de lo que serían los ancestros del sombrero se encuentran en pinturas y grabados de las culturas persa, egipcia y griega, primero en forma de tocados y posteriormente ya con formas y estructuras muy variadas.

Los materiales y formatos de la prenda sugerían ya en aquel entonces el estatus de su portador, y después, al extenderse su uso acabó por convertirse en distintivo de elegancia y de categoría social.

Desde luego que su uso no era exclusivo del orgulloso contingente masculino, ya que lo portaban hombres y mujeres por igual.

Se popularizó, y con ello prosperó el gremio dedicado a su manufactura que constantemente se esforzaba en ofrecer nuevos productos a su potencial mercado, atractivos y sobre todo funcionales y accesibles.

Se confeccionaban ante todo adornos, artículos de lujo, casi obras de artesanía. Tal vez pocos recordaban la intención original de cubrirse del frío, del sol o de la lluvia 

La especie original de “cubre cabezas” evolucionó ramificándose en distintos grupos, aunque siempre emparentados entre sí: cofias, boinas, birretes, gorras y gorros, turbantes, capuchas, penachos, cascos, viseras, tocados y sombreros.

Llegada del sombrero a México

A México el sombrero llega con los españoles, no en la conquista, sino después, durante la colonización, cuando empezaron a venir a establecerse numerosos grupos de emigrantes en busca de destino y de fortuna, que por lo regular lograban.

Empezó a venir gente de todos los sectores: curas, militares, intelectuales, nobles, abogados, doctores, aristócratas y familias convencionales, así como aventureros, maleantes, prófugos y ex presidiarios.

Con el paso de los años esa población se mestizó paulatinamente con los locales o entre ellos mismos, y las posteriores generaciones resultantes ya netamente mexicanas crearon su cultura propia con sus tradiciones, sus costumbres, su cocina, su lenguaje coloquial y su moda en el actuar y en el vestir. 

Los estilos de sombrero que trajeron también se mestizaron adoptando diseños muy particulares, y así es como aparecen los sombreros propiamente mexicanos.

Aunque la denominación es arbitraria por faltarle precisión se consideran sombreros mexicanos los siguientes:

Sombrero vaquero, norteño, texano o texana

El sombrero vaquero, norteño, texano o texana es un tipo de sombrero que se usa sobre todo en el norte del país cerca de la frontera con los Estados Unidos, región con la que se comparte dicho estilo.

Primordialmente es de copa alta y ala ancha, fabricado en una cantidad de hormas muy extensa para que cada quien elija la que corresponda a su gusto preferido.

Esto de las preferencias tiene sus razones y no se trata de un capricho, ya que es importante portar el adecuado.

Factores a la hora de elegir un sombrero:

La talla del sombrero, es decir, que ajuste bien en la cabeza.

La estatura de la persona que lo vaya a usar, puesto que un sombrero demasiado grande en una persona de estatura corta simplemente no concuerda.

Una persona con la cara más bien redondeada debe usar un sombrero que contraste y evitar los de forma circular.

Por el contrario, en un rostro cuadrado o alargado sientan mejor los sombreros redondeados.

El sombrero vaquero se confecciona de materiales diferentes, como el fieltro, el cuero, la lana, la piel de conejo y otros animales.

Sombrero Calentano

El sombrero calentano es el clásico de palma o fibra que se ve por todos lados. Es muy fresco y pesa poco, y se pueden encontrar de precios muy variados según el material y la manufactura.

El nombre procede de la región donde se originó, tierra caliente, que abarca varios municipios de los estados de Guerrero, Michoacán y el Estado de México. Por supuesto que se usa en toda la república, aunque el nombre se mantiene por comodidad o por una clase de respeto.

Sombrero Jipi

El Sombrero Jipi, también conocido como sombrero panameño o panamá, es otra clase de prenda elaborada de palma, éste de la hoja de la palma de jipi, originaria del estado de Campeche. 

Tiene características muy similares a las del calentano, como el peso y la frescura, así como la diversidad en precios, tallas, modelos y colores.

Se usa en climas soleados y calientes para andar en la calle y para trabajar al aire libre; precisamente para no sufrir una insolación.

Sombrero de Charro

El Sombrero de charro es sin duda el más representativo de nuestros sombreros, alcanzando el nivel de emblema nacional junto con otros como el mariachi, el tequila, el charro, los trajes típicos, el chile, el chal y el rebozo, la cocina y las pirámides.

Este modelo no es nada barato, es muy caro, y lo usan sobre todo los mariachis para trabajar y otra gente en ceremonias y festividades muy concretas.

Supongo que no es precisamente cómodo portar un sombrero de esa clase, de ese estilo y dimensiones, pero por supuesto que tiene su atractivo verlo desde lejos. 

Sombrero en la actualidad

En la actualidad el sombrero ya no se usa tanto como antes, ha pasado de moda aquí y en todo el mundo porque así es este asunto de las modas, voluble, inestable, caprichoso, que van y vienen y más tarde regresan otra vez.

Sin embargo el sombrero aguarda agazapado en un rincón, preparado para resurgir en el momento más inesperado cuando se presente la ocasión.